El día 8 de octubre de 2008 escribí un poema, dedicado al 11-M, que, recitado por mí en diferentes tertulias literarias de Madrid, provocó mi expulsión de la que tiene lugar en el Círculo de Bellas Artes. Lo publico ahora en esta tribuna, precedido de las palabras que le sirven de preámbulo, para que se tenga idea clara del grado de persecución a que se ve sometida, en ciertos ambientes culturales, la libertad de expresión.

Dos días después de aquel terrible 11 de marzo, muchos formaron rebaño, en plena jornada de reflexión, para exigir al Gobierno la verdad de lo ocurrido. Me pregunto dónde están hoy. El día 11 de cada mes, unos llamados Peones Negros, que, de verdad, quieren saber quiénes se encuentran detrás de aquella matanza, acuden a la estación de Atocha, con ánimo de honrar a las víctimas de tan tremendo atentado. En ellos pensaba cuando, en octubre de 2008, escribí estos versos. Me encantaría tener la oportunidad de recitárselos a Zapatero; pero no a solas, sino en un abarrotado Congreso de los Diputados, ante mil cámaras de televisión, en nombre de las víctimas del 11-M.


Fernando Lago

Poema dedicado al 11-M

domingo, 26 de octubre de 2014

Somnolencia nacionalista


Twitteando con escopeta (143)

Si Cataluña fuera hoy una nación, el salario mínimo interprofesional de los catalanes ascendería a 1714 euros.

Cuando Cataluña sea una nación, los 100 grados de la escala Centígrada se corresponderán con los 1714 de la Pujólica.

Cuando Cataluña se convierta, al fin, en una nación, su nueva moneda será el Olegario, y un olegario equivaldrá a 1714 euros.

Cuando Cataluña sea una nación, las distancias se medirán en Junqueros, y 2.000 metros equivaldrán a 1714 junqueros.

Si Cataluña fuera hoy una nación europea, cada catalán podría comprarse el último deportivo de Ferrari, por 1714 euros.

Tío Chinto de Couzadoiro


"Vida oculta de Pepiño Blanco"
  Enlace al capítulo 35: El chisquero
   

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