Una nación de naciones (7)
Me cabe la satisfacción de haber asistido a la ceremonia de coronación del Rey de Cataluña. Tuvo lugar en Barcelona, el pasado seis de marzo, y no encuentro más que palabras elogiosas para describirla. ¡Qué boato, qué esplendor, qué pompa! ¡Jamás ojo humano vio tanta solemnidad!
Arturo llegó al Nou Camp en silla gestatoria, en medio de una ensordecedora aclamación popular. El estadio se había transformado en una gigantesca corona que acogía, maternalmente, al pueblo catalán. No puede negarse que los catalanes, liberados, por fin, de la cruel opresión de España, han sabido organizarse como nación. Cataluña ha mirado al pasado, y se ha constituido en monarquía. Pero, naturalmente, el Gobierno catalán, más que de instauración, habla de restauración monárquica, pues entiende que el Reino de Cataluña se pierde en la noche de los tiempos de un remoto pasado. Y, con intención de convencernos de ello, viendo que la monarquía francesa concluyó con el infortunado Luis XVI, cuyo ordinal sugiere un corto recorrido monárquico, buscó uno mayor para Arturo. A tal efecto, Arturo fue coronado, por el Obispo de Olot, como Arturo XXIX. Las palabras de Monseñor Tafalla resultaron memorables, por su grandilocuencia: "Honor a ti, Arturo XXIX, de tan larga dinastía que ya Arturo I, siglos antes de que el legendario Don Pelayo fuera grande en Covadonga, fundó el reino de Cataluña. La cruz de Cristo se doblega, noble caudillo, ante la invicta espada de tus antepasados, para que la guíes, entre las naciones de la tierra, hasta el fin de los tiempos."
Coincidiendo con la conclusión de tan elevado discurso, un relámpago rasgó el firmamento, y, tras él, un trueno horrísono dejó estremecido al auditorio. El estadio comenzó a cerrarse, lentamente, por arriba, hasta quedar cubierto por una enorme bóveda, sobre la cual se proyectó un inmenso planetario que tenía por centro el planeta Cataluña, iluminado por el astro Arturo XXIX. Quedamos todos anonadados, sobrecogidos por tanta grandeza. El imperialismo catalán no tenía más límite que el Universo.
Lajo Demos
y ¿te ha "llenado de orgullo y satisfacción"...?
ResponderEliminarPompa y butifarra no combinan muy bien jeje
Un saludo cariñoso desde mi medio retiro para los nervios (y no te olvides de mi Pepiño que lo tienes abandonadiño y entro de vez en cuando a leer)
¡Ja-ja-ja-ja-já! ¡Como al Rey!
EliminarSé que soy un mal padre, Maribeluca, por mi abandono prolongado de Pepiño, precisamente ahora, cuando más me necesita. Volveré pronto con él.
Te envío mi más cordial saludo, a ese medio retiro tuyo.
Cuando leo entradas como esta, Tío Chinto, me asaltan varias sensaciones. Por un lado, la enorme carcajada provocada por tanta ironía... pero, por otro lado, el temor atroz a que estas ficciones se acaben por convertir en realidad.
ResponderEliminarTodo puede suceder en Matrix, amigo mío.
Hasta lo más absurdo tiene cabida en este Nación de Naciones.
Un abrazo, campeón.
Cuando yo las escribo, amigo Herep, lo que siento es, en cierto modo, parecido a lo que sientes tú. No sé muy bien si estoy fantaseando o describiendo una realidad oculta. De todos modos, tú y yo sabemos que, cuando nos enfrentamos a un disparate como este de la nación de naciones, la exageración ayuda mucho a comprenderlo.
EliminarUn cordial abrazo.
Muy bien dicho, Chinto:
ResponderEliminarPero creo que los cartalanes no tienen un gran sentido del humor,que pueden creerse incluso, que lo tuyo no es una coña.
Imaginación y humor galaico, ya lo creo.
Unha aperta.
Gracias, amigo Xesús.
EliminarNo tengo ninguna duda sobre lo que dices. No hablo gallego, no tengo acento gallego, pero soy profundamente gallego. Los nacionalistas de nuestra tierra deberían saberlo: se puede ser gallego de pura cepa, aun sin hablar gallego. Tal vez el humor y la imaginación que me reconoces, prueban lo que digo.
Un cordial abrazo.
Tan pasado y tan perdido que por mucho busquen ese antiquísimo "reino" que ellos llaman nación, jamás lo encontrarán, salvo en su mente, claro está, que allí pueden inventar todos los reinos que quieran.
ResponderEliminarSe ve que le va bien a esa monarquia del Arturo XXIX (¿en que biblioteca tendrán guardada tan ilustre saga? Son tan rácanos que todo lo que guardan cría pelo y no nos lo dejan ver) que hasta le dieron la vuelta al Camp Nou. Tal vez desde ahí, desde ese ilustre campo, salgan los cohetes llenos de butifarra y pa i tomàquet que comercializarán por esos mundos alienígenas.
Muy buena la historia.
Lo que yo expongo de forma tan exagerada, Xad Mar, está probablemente en el ánimo de esos nacionalistas que sueñan despiertos con el imperio catalán. Me gusta la idea de los cohetes, cargados de productos catalanes, que servirán para colonizar otros mundos.
EliminarAgradezco tu elogio, y te envío mi más cordial saludo.
Juajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajuajua
ResponderEliminarY
plasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplas.
Me Temo que ARTURET XXIX, Como Cualquier MACHBETH BARATO Y ENTRONIZADO "DE ESA FORMA",No Tardará en Acabar Sus CORTOS DÍAS REINANTES, A Manos de La Daga Traidora del Ambicioso Príncipe, ORIOLET D'ELA CAIXETA o Envenenat por Las BRUJAS DEL CALDERO, Que Con la Complicidad de FERRÁN ADRIÁ, Le Harán Probar,-En un Banquete, "Unos Sabrosísimos PERCEBES REGALO DEL MONARCA MOJAMÉ XXXII, De PROBADA CALIDAD Y SABOR...
SIC TRANSIT GLORIA MUNDI, Amigos...
Pero Lo Que Es CIERTO, Es Que Los Que Entraron en el Lugar de la CORONACIÓN, Aún Están INTENTANDO SALIR DE ALLÍ, PORQUE EL MECANISMO DE "CIERRE/APERTURA" DE LA CÚPULA, SE AVERIÓ Y EL EMBAJADOR APELES SE HA GASTADO LA "COMISIÓN" DEL "TRES POR CENT" QUE LE DIERA EL CONSTRUCTOR Y ÉSTE, ESTÄEN PARADERO DESCONOCIDO...
¡PROBETICOS!¡ALGUNOS YA ESTÁN EMPEZANDO A COMERSE A LOS MÁS GORDOS!
Saludos
Brindis Aún con BEZOYA DE GARRAFÓN DE CINCO LITROS, "GRAN RESERVA"
y
¡¡RIAU RIAU!!
¡Ja-ja-ja-ja-já! Ya veo, amigo Old Nick, que tenéis información actualizada sobre el acontecimiento que describo; pues debo reconocer que desconocía lo del fallo producido en el sistema de apertura de la bóveda. Advierto, con satisfacción, que vuestro tratamiento va viento en popa.
EliminarBrindemos por ello, con Bezoya Gran Reserva, y unámonos en un cordial abrazo.
Honor al rey de los gallumbos de oro!!
ResponderEliminarQue por frikilandia no quede, son lo plus de lo plus porque no me digas que no tiene mérito pasar de la botifarra al cus cus en una sola generación.
Ay Dios...si no fuera por estos ratos.. :))
Será reconocido por la historia como Arturo XXIX, el mandibuloso. Se africanizan, Candela, a pasos agigantados. En poco tiempo, pueden comer "a la turca", tumbados entre almohadas, cojines y almohadones. ¡El progreso es el progreso!
EliminarTío Chinto, aquí le mando un estudio que conservo sobre la gran mentira nacionalista (son nueve puntos):
ResponderEliminar11 de septiembre de 1714: ¿sabías que…?
1) El 11 de septiembre se conmemora la rendición de la ciudad de Barcelona en 1714, tras la declaración de guerra de las Cortes Catalanas el 10 de julio del mismo año al no reconocer éstas el Tratado de Utrecht que ponía fin a la Guerra de Sucesión Española. La guerra no fue de secesión, como los nacionalistas venden, sino de sucesión. En dicho Tratado el pretendiente a la Corona Española, el Archiduque Carlos de Habsburgo renuncia al trono, reconociendo la soberanía de Felipe D'Anjou, contra el que se la disputó en la llamada Guerra de Sucesión Española, tras la muerte sin descendencia del Rey de España Carlos II. Es decir, fue una guerra civil entre partidarios de dos pretendientes a suceder en la corona de España al rey muerto sin descendencia.
2) Madrid, Alcalá y Toledo lucharon en el mismo bando que Barcelona. La Guerra de Sucesión española, al contrario de lo que argumentan los nacionalistas, no supuso el enfrentamiento entre Cataluña- Austria y España (o Castilla) - Francia. Ciudades y comarcas pertenecientes al antiguo reino de Aragón como Castellón, Alicante, Calatayud o Tarazona, así como el valle de Arán, y ciudades del interior de Cataluña como Vic y Cervera, fueron partidarias de Felipe V, el rey Borbón. Y lugares como Madrid, Alcalá o Toledo se declararon fieles al aspirante austriaco, el archiduque Carlos. El enfrentamiento entre territorios españoles de 1714 es otra falsedad esgrimida por el nacionalismo para negar el carácter de guerra civil que tuvo aquella sucesión al trono. En realidad ésta fue una contienda internacional en la que se dirimía la hegemonía entre las diferentes potencias europeas.
3) Los catalanes no perdieron sus libertades civiles, sino que los poderosos perdieron sus privilegios exclusivos. Las Cortes Catalanas, lejos de tener las características de una democracia, tal y como la entendemos ahora, representaban a los tres estamentos (clero, nobleza y burguesía urbana) a los que, dentro del patrón feudal del Antiguo Régimen, el Rey les había concedido tal privilegio, relegando totalmente a la inmensa mayoría de la población. Del Rey emanaban todas las instituciones.
4) La facción en Cataluña favorable al pretendiente Carlos no partió de una rebelión espontánea ni popular. En realidad, expresaba los intereses políticos de la clase dirigente barcelonesa que quería potenciar su presencia comercial en América, de tal forma que sus privilegios forales no estaban en juego, ya que el pretendiente Borbón en ningún momento los cuestionó.
ResponderEliminar5) El Rey Borbón reinó sin oposición interna entre 1700 y 1705 hasta el punto que en 1701 había celebrado Cortes en Barcelona, donde no sólo confirmó los fueros, sino que recibió numerosas donaciones.
6) Los seguidores de Carlos de Habsburgo en Cataluña defendían la unidad de España. Trataban de imponer su candidato al conjunto de todo el país, apelando a la libertad de toda España, recelosos de la influencia francesa; lejos, pues, de cualquier aspiración secesionista o desmembradora. Los soldados que fueron derrotados el 11 de septiembre de 1714 frente a las tropas de Felipe V estaban mandados por el general Antonio de Villarroel, que en su última arenga les recordó: "estáis luchando por nosotros y por toda la nación española".
7) El denominado decreto de Nueva Planta, llamada en realidad Cédula Real de Nueva Planta de la Real Audiencia del Principado de Cataluña, organizaba las instituciones judiciales en Cataluña, respetando las Constituciones y prácticas previas, estableciendo que los letrados fuesen expertos en legislación y lengua catalana. Fijaba el castellano meramente como lengua jurídica y eliminaba los privilegios por nacimiento en un territorio determinado.
ResponderEliminar8) El final de la guerra supuso el final de tres siglos de decadencia de Cataluña y el inicio de su resurgimiento económico. El siglo XVIII, lejos de ser un periodo de declive en Cataluña, resultó ser una etapa de particular esplendor y auge demográfico, agrícola, comercial e industrial, que más que fundamentarse en el comercio internacional, centrado en productos agrícolas, se benefició del proteccionismo de la Corona.
9) Rafael Casanova no fue un mártir. El día del asalto final de las tropas borbónicas, Casanova estaba durmiendo y, avisado, se presentó en la muralla con el estandarte de Santa Eulalia para dar ánimos a los defensores. Herido de poca gravedad por una bala en el muslo. Casanova fue trasladado al colegio de la Merced, donde se le practicó una primera cura. Tras caer la ciudad en manos de las fuerzas borbónicas, quemó los archivos, se hizo pasar por muerto, y delegó la rendición en otro consejero. Huyó de la ciudad disfrazado de fraile y se escondió en una finca de su hijo en Sant Boi de Llobregat. En 1719 fue amnistiado y volvió a ejercer como abogado sin ningún problema hasta retirarse en 1737. Murió en Sant Boi de Llobregat en 1743. Un verdadero "héroe".
FUENTES: John Lynch: "La España del siglo XVIII". Ed.Crítica. Pere Anguera: "El 11 de septiembre. Orígenes y consolidación de la Diada". Revista "Los días de España", núm. 51, 2003. Núria Sales: "Els segles de la decadència: segles XVI-XVIII". Edicions 62. "Nueva planta de la Real Audiencia del Principado de Cataluña establecida por su Majestad por Decreto de 16/09/1716", imprenta de Joseph Teixidó.
ResponderEliminarTe agradezco, amigo rataplan, la detallada información que me das sobre esa fecha en la que está el origen de la Diada. No conocía la "heroicidad" de Casanova. Creo que haces bien en oponer, a las invenciones nacionalistas, las realidades nacionales.
EliminarUn cordial saludo.
El rey del 3 por ciento es el mejor titulo para este payaso de Arturito,Una vez mas un post divertidisimo y refrescante,un saludo y mis gracias a el blogero Rataplan por esa veridica informacion que aporta.
ResponderEliminarLa burla resulta siempre, amigo Agustín, un remedio muy eficaz contra la estupidez humana.
EliminarEl comentario del amigo rataplan, tan lleno de detalles interesantes, es un tortazo muy bien dado al nacionalismo falseador que conocemos.
Un cordial saludo.
Lo que cuenta el Sr. rataplan esta muy bien. Pero hombre donde este una coronación por todo lo alto y en el nou camp, con pep guardiola de monagillo, serrat cantando saetas, la moreneta dando vueltas por el césped al grito de ¡guapa, guapa, que no eres negra que eres blanca!, ferran adría hacienda butifarras y cebolletas al as a toda pastilla, ¡hombre! donde este eso que se quite todo lo demás. La verdad histórica no es impedimento, una simpleza así no puede truncar el destino en lo universal de la nasió catalufa, jajajaj.
ResponderEliminarSaluditos.
¡Ja-ja-ja-ja-já! Mi amigo Lajo Demos describe, a grandes rasgos, lo sucedido en el día de la coronación de Arturo XXIX; pero tú, amigo Zorrete, desciendes al detalle, de manera tronchante. ¡La nación catalana y su destino en lo universal! ¡Ja-ja-ja-ja-já!
EliminarUn cordial saludito, en este día suave del verano madrileño.
Muy cachondo.
ResponderEliminarEl nacionalismo catalán, como el vasco o el gallego, sólo puede ser tomado, amigo Mamuma, con mucho cachondeo.
EliminarEstimado Tío Chinto, lo has "bordao". Me duelen los entresijos de tanto reírme por el decojono que provoca la lectura de tu post. Pero debo rectificar la opinión de alguno de tus comentaristas cuando afirman que los catalanes no tienen sentido del humor. Yo soy catalán y me río de todos los catalanes que se miran el ombligo creyéndose el centro del universo político. Toda los componentes de esa peña de catalán-naZionalismo, son una panda de advenedizos dispuestas simplemente a medrar a costa del Erario Público perteneciente al resto de españoles.
ResponderEliminarMis saludos, Tío Chinto.
Me alegro por ello, amigo José Luis.
ResponderEliminarYo sé que el catalán tiene sentido del humor. ¡Cómo no va a tenerlo! Y retranca, sorna e ironía. Y quiero a Cataluña de un modo muy especial, ya que uno de mis bisabuelos, originario de Cadaqués, fue uno de los catalanes que montaron la industria conservera en Galicia. ¿Habrá algún español -incluidos los gallegos, los vascos y los catalanes- que no lleve, en las venas, sangre de todas las regiones españolas.
Un cordial abrazo.
Lo malo, don lajo, de la megalomanía y el narcisismo nacionalistas es que el divertido esperpento que nos ha ofrecido les parecería hasta poco. Viendo la jeta de sobrado que prodiga el Honorable (sic), creo que no aceptaría menos de un Arturo 2000... Ha dado Vd. totalmente en el clavo con lo del planeta Cataluña, que obviamente vuelve a reeditar la teoría geocéntrica, esta vez con barretina y banderas con estrellita. Y siempre, como Vd. y otros comentaristas han hecho, hay que evitar caer por todos los medios en la trampa tanto éxito ha dado a los nacionalistas: suscitar odios a toda (en este caso) Cataluña propiciando una identificación entre ellos y la tierra que falazmente presumen de defender. Ni éstos son Cataluña ni aquéllos son las Vascongadas, etc.
ResponderEliminarUn saludo muy cordial. Por cierto, muy interesante su anterior entrada, de la cual tomo buena nota.
Me temo que sí, amigo Antonio. Así como el "Calígula" de Camus buscaba el imposible, nuestros nacionalistas quieren el imposible y algo más; reconozco que me he quedado corto. El imperialismo catalán pretende ir más allá de los límites del Universo. ¡Total nada!
ResponderEliminarNo deja de desconcertarme el hecho, tantas veces constatado, de que una narración disparatada contribuya a explicar ciertas realidades.
Como siempre, reciba, con mi agradecimiento por su amable comentario, mi más cordial saludo.
Arturo I el Mandíbulas, condón de Barcelona
ResponderEliminar¡Ja-ja-ja-ja-já! No está nada mal, Sevilla Opina.
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